Homenaje (tribute) al triunfo de la mujer hispana

En una época bastante reciente la mujer hispana tenía un papel tradicional. Tenía pocas oportunidades para la educación o una carrera profesional. Las mujeres que trabajaban fuera de casa para mantener a su familia, solían trabajar en el sector de los servicios como criada, camarera u oficinista. Hoy en día este papel tradicional de la mujer hispana está cambiando y hay un número creciente de mujeres que han triunfado trabajando en puestos profesionales. Las mujeres hispanas más reconocidas son las que trabajan en el cine, la televisión o la música. Casi todos conocen al grupo de mujeres hispanas de Hollywood que incluye las famosas Camerón Díaz, Salma Hayek, Jennifer López y Rita Moreno. En la televisión se puede mencionar María Elena Salinas y Cristina Saralegui. Y en el mundo de la música y la danza están Gloria Estefan y Chita Rivera. Pero hoy en día también hay empresarias, publicistas, políticas, científicas y artistas que son un ejemplo de talento y tenacidad, por haber logrado el triunfo en los EE.UU. venciendo todos los obstáculos. A continuación se presentan las historias de algunas mujeres en un homenaje al triunfo de la mujer hispana.

Linda Alvarado

Linda Alvarado cree en «el sueño americano» y espera que llegue el día en que la gente sea juzgada no por sus orígenes, sino por sus capacidades. Explica que «Éste es un sueño al que no podemos renunciar y los hispanos debemos compartirlo, porque, somos una pieza clave en el futuro de los EE.UU.»

Linda Alvarado sabe lo que dice. Hoy es presidenta de Alvarado Construction, una empresa constructora en Denver, Colorado, que se especializa en el campo de la ingeniería industrial, comercial, telecomunicaciones y ambiente. En la empresa trabajan 2.000 empleados en quince estados.

Linda nació en Albuquerque, Nuevo México, y es la única mujer de seis hijos. Asistió a la Universidad de Pomona, en California, donde estudió economía. «Como mucha gente, yo necesitaba un trabajo. Entré en una empresa de paisajismo, y empecé como obrera, regando plantas. Pero me gustaba. Trabajaba como un montón de hombres».

Cuando terminó la universidad, no podía conseguir empleo. Finalmente, la contrató una empresa constructora en California. Comenzó a tomar cursos de inspección de terreno en California State University, para adquirir destrezas, pero «no fui muy bien acogida. Era la única mujer en la clase».

Con el tiempo comenzó a soñar con «empezar mi compañía constructora». Y recurrió a seis bancos en busca de financiamiento. Los seis la rechazaron. «Finalmente, mis padres hipotecaron su casa por la cantidad de 2.500 dólares para ayudarme con los comienzos». Además de triunfar en su compañía, Linda hizo historia al ser la primera mujer hispana propietaria y socia de la franquicia de un equipo de béisbol de liga mayor: los Rockies de Colorado. Ha recibido numerosos premios y distinciones de su comunidad en su calidad de hispana y empresaria exitosa.

Daisy Expósito

Daisy Expósito es una mujer de trato amable y buen humor, dos de las claves de su éxito como profesional, según dice ella, que ha desarrollado una carrera extraordinaria. Cubana de nacimiento, Daisy trabaja en The Bravo Group, filial hispana de la multinacional Young & Rubicam, la agencia de publicidad en español con mayores ingresos en los EE.UU. Comenzó como directora creativa y llegó a presidenta en 12 años. Bajo su dirección, el capital de facturación de la agencia creció desde menos de 5 millones de dólares, hasta cerca de los 300 millones de dólares.

Como en la mayoría de las historias de éxito, su camino estuvo lleno de grandes sacrificios y experiencias difíciles de olvidar. «Tenía 10 años cuando abandoné mi hogar en Cuba. Para mí fue un tremendo choque emocional. Viajamos a España, a casa de unos familiares. Mientras yo lloraba, mi padre, que lo había perdido todo, repetía: -Bueno, hay que empezar de nuevo… no hay otro camino», recuerda Daisy, que de esta forma recogió su más valiosa experiencia, que la marcó para el resto de sus días: no mirar atrás, no rendirse nunca, comenzar de cero, una y otra vez, si es necesario.

Después de un año en España, la familia Expósito llegó a Nueva York. «Sabía algunas palabras en inglés, pero me sentía perdida en una ciudad tan grande».

Mientras estudiaba sicología y comunicaciones, dio sus primeros pasos como productora de anuncios para radio, TV y prensa, en Connell Advertising. Hace poco más de 20 años ingresó en una agencia de publicidad dedicada al mercado hispano. Daisy ha sido reconocida dentro del grupo de los «100 Mejores Ejecutivos» de los EE.UU. Ha ganado numerosas distinciones y acaba de ser seleccionada para el Premio Matrix como una de las «mujeres que cambian el mundo».

Ellen Ochoa

Ellen Ochoa es la primera astronauta de la NASA con raíces hispanas. Fue su inclinación especial por las matemáticas en la escuela secundaria que la puso en la ruta del espacio. Después, se interesó por la física y tiene una maestría en ciencias y un doctorado en ingeniería eléctrica. Ellen es la tercera de cinco hijos. Nació en California de madre estadounidense y padre mexicano. «Él ya murió, pero mis padres se divorciaron cuando yo era pequeña, así que fue mi madre quien me educó y siempre me animó a estudiar», dice.

Ellen ha recibido varios premios, como Ingeniera Hispana del Año y Liderazgo de la Herencia Hispana, y es co-inventora de tres patentes relacionadas con la ingeniería óptica. También ha obtenido medallas por los vuelos espaciales que ha realizado. En abril de 2002, fue en la misión del 13th Shuttle a visitar la Estación Espacial Internacional.

«Por mi carrera he hecho grandes sacrificios, como no haberle podido dedicar el tiempo que hubiese querido a mi primer hijo». Pero su esposo, a quien conoció dentro de la misma NASA, la apoya incondicionalmente.

Ileana Ros-Lehtinen

Ileana Ros-Lehtinen es la primera mujer hispana elegida al Congreso de los EE.UU., donde representa al Distrito 18, de la Florida. Es una luchadora incansable por la libertad y la democracia. Es la voz de los refugiados que vienen a este país huyendo de los suyos por situaciones políticas adversas y gestiona para que les den un estatus legal en este país. Ileana dice, «Una de las causas más fuertes que están en mi corazón es crear fondos para ayudar a los refugiados a que puedan obtener su ciudadanía».

Ileana Ros-Lehtinen nació en La Habana, Cuba, y vino a los EE.UU. con su familia, cuando tenía siete años. «Mis padres son mis modelos. Ellos perdieron todo cuando salieron de Cuba, pero nunca miraron hacia atrás».

Sin hablar una palabra en inglés, se integró al sistema escolar norteamericano. Con el tiempo, obtuvo su licenciatura y una maestría de la Florida International University. Ileana había empezado su carrera como educadora y fundó una escuela elemental privada en el sur de la Florida. Desde 1982, Ileana ha demostrado su liderazgo legislativo. Sirvió cuatro años en la Casa de Representantes de la Florida y se convirtió después en senadora del estado. Esta representante ante el Congreso de los EE.UU. es muy conocida por defender los derechos humanos. Ha sido muy activa a nivel de la Florida, en temas relacionados con la educación, el ambiente, los niños, los ancianos, las mujeres y su salud.

Ella y su esposo, Dexter Lehtinen, en una época fueron senadores del estado. Juntos tienen cuatro hijos.